Aunque el verano puede ser una de nuestras estaciones favoritas del año por muchos motivos, no hay que pasar por alto que durante estos meses nuestra piel y cabello sufren las consecuencias de la radiación solar. Además de otros factores externos como pueden ser el cloro de la piscina o el calor y la sequedad ambiental. Por todo esto, resulta interesante saber cómo recuperar la piel después del verano, así como los productos más indicados para conseguirlo.
¿Qué le pasa a la piel en verano?
Los largos días del verano son una invitación en toda regla para salir a disfrutar del tiempo libre; tomar el sol, bañarnos en la piscina o sumergirnos en el mar. Pero si no tomamos las precauciones adecuadas, todos estos planes pueden tener consecuencias negativas en la piel y el cabello, como puede ser la pérdida de hidratación, sequedad, envejecimiento prematuro o hiperpigmentación.
Deshidratación de la piel
Las altas temperaturas, el viento y el efecto del sol, pueden deshidratar la piel, haciendo que se vuelva seca y escamosa. La sudoración excesiva, o el uso de aire acondicionado, también pueden llevar a la pérdida de humedad y electrolitos, dejando la piel opaca y sin vida.
Consumir suficiente agua ayuda a mantener la hidratación de la piel. Mientras que externamente, es de ayuda aplicar cremas y lociones hidratantes que ayuden a retener la humedad.
En tu objetivo de recuperar la piel después del verano, no puedes olvidar usar una buena crema hidratante con protección solar y antioxidantes. Además, las ampollas Anti-Pollution de Toskani aportan un plus de vitaminas A, B3, C Y E, con importantes efectos antioxidantes.
Daños por radiación solar
Los rayos UV pueden penetrar la piel y causar daños a nivel celular. Una exposición prolongada al sol, sin la protección adecuada, provoca quemaduras solares que se manifiestan como enrojecimiento, dolor y, en casos graves, ampollas. Estas quemaduras no sólo son dolorosas, sino que también aumentan el riesgo de sufrir cáncer de piel.
Por otro lado, la radiación UV acelera el envejecimiento de la piel, causando arrugas, manchas oscuras, o léntigos solares, y pérdida de elasticidad.
Para recuperar la piel después del verano, y poder reducir y evitar esta aparición de manchas, es importante aplicar tratamientos antimanchas y despigmentantes de alta protección.
La gama despigmentante de Toskani ayuda a tonificar el tono y atenuar las manchas en la piel.
Aparición de acné en verano
El calor, la humedad, y el uso de productos solares grasos, pueden aumentar la producción de sebo, lo que puede obstruir los poros y causar brotes de acné, espinillas y puntos negros.
Para evitar este problema y recuperar la piel después del verano, limpia tu rostro con productos adecuados a tu tipo de piel, que eliminen los restos de sudor, suciedad y exceso de grasa. Añade también un exfoliante a tu rutina de belleza y cuidado facial. Este producto ayuda a eliminar células muertas y consigue una mejor absorción de los productos para el cuidado de la piel.
Consejos para cuidar el pelo después del verano
La piel no es la única que sufre en verano. El sol intenso de la temporada estival, el cloro, la sal y los cambios bruscos de temperatura, pueden dejar tu melena seca, dañada y sin vida.
Pero no te preocupes, porque con los cuidados adecuados y los productos capilares indicados, seguro que puedes volver a lucir un pelo radiante y listo para el nuevo curso.
Tratamientos hidratantes para el pelo
El sol y el agua salada pueden deshidratar tu cabello. Usa mascarillas capilares hidratantes o ampollas monodosis Dexanyl para combatir el aspecto de un pelo seco y dañado.
Tratamientos nutritivos para recuperar la piel (y el cabello) después del verano
Los aceites naturales pueden proporcionar una nutrición profunda y restaurar el brillo y la suavidad de tu cabello. También puedes utilizar sérums y ampollas concentradas para la reparación del cabello dañado. Por ejemplo, las ampollas monodosis B-Hidroxin de Toskani aportan vitamina B7 para fortalecer el cabello.
Adiós puntas abiertas
Después del verano, es común tener las puntas abiertas y el cabello dañado. Programa un corte de pelo de mantenimiento para eliminar las partes dañadas y prevenir que el daño se extienda.
Por último, recuerda evitar hacer un uso excesivo de productos de aplicación de calor y apuesta por champús y acondicionadores que sean respetuosos con tu cabello.